Ir a su fin del mundo.

Hace días escuché la predicación de un misionero, y nos decía en parte del mensaje que debíamos ir a otros lugares adonde el mundo nos necesitaba, la verdad admiro mucho el trabajo de estos hermanos, y me puse a pensar en que no solo debemos viajar geográficamente para hacer misiones, creo que sus vidas son especiales, dejan mucho por la obra de Cristo, pero nosotros también podemos hacerlo en el lugar donde estamos, podemos ser misioneros con nuestro prójimo más cercano geográficamente, pero lejos espiritualmente, como nuestra familia tal vez, algunos amigos, nuestros vecinos, compañeros de trabajo o de estudios, la persona del negocio cercano a nuestro hogar, el conductor de un colectivo, la persona que esta delante de nosotros en una fila de un banco.

Se me vienen a la mente dos textos:
"Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;
enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén."
Mateo 28: 18-20.
"y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día;
y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén.
Y vosotros sois testigos de estas cosas.
He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto."
Lucas 24:46-49.
Estos dos textos nos mandan a ir; hay aún lugares en la Tierra en donde no se ha hablado de Dios, esperemos que Dios use a esos misioneros que tienen el llamado de ir y dejar todo lo que tienen, oremos por ellos y por ti si es que tienes la convicción o el llamado, pidamos para que Dios los use, los llene, los guíe, los fortalezca, y también oremos por nosotros para que cumplamos con el propósito de Dios en predicar su palabra, quizás cerca de donde estamos ahora hay personas que han escuchado de Dios, pero no han tenido la oportunidad de tener un encuentro con Él, seamos los encargados de cumplir esta labor y ser luz para toda persona que esté a nuestro alrededor.
Creo que, ir por todo el mundo no significa ir y hacer un gran viaje geográfico, sino que según como lo veamos puede ser ir adonde nuestro vecino por ejemplo, y él puede estar en su "fin del mundo" lejos de Dios.
Sé de bendición para cada persona.