jueves, 22 de agosto de 2013

Mateo 26:33-44.



"Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré.Jesús le dijo: De cierto te digo que esta noche, antes que el gallo cante, me negarás tres veces.Pedro le dijo: Aunque me sea necesario morir contigo, no te negaré. Y todos los discípulos dijeron lo mismo.Entonces llegó Jesús con ellos a un lugar que se llama Getsemaní, y dijo a sus discípulos: Sentaos aquí, entre tanto que voy allí y oro.
Y tomando a Pedro, y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a entristecerse y a angustiarse en gran manera.
Entonces Jesús les dijo: Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí, y velad conmigo.
Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú.
Vino luego a sus discípulos, y los halló durmiendo, y dijo a Pedro: ¿Así que no habéis podido velar conmigo una hora?
Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil.
Otra vez fue, y oró por segunda vez, diciendo: Padre mío, si no puede pasar de mí esta copa sin que yo la beba, hágase tu voluntad.
Vino otra vez y los halló durmiendo, porque los ojos de ellos estaban cargados de sueño.Y dejándolos, se fue de nuevo, y oró por tercera vez, diciendo las mismas palabras."
Mateo 26:33-44.


Este capítulo en general esta semana ha llenado e impactado mi vida, a pesar de haberlo leído antes ya en algunas ocasiones, siento la tensión y trato de ver por detalle el acontecimiento, que se divide en varias partes.Primero, Pedro, creía que nunca iba a negar a Jesús, pero lo hizo; menciona la Biblia que todos sus discípulos estaban dispuestos a morir por él, en ese momento no fue así, quizás hubo desesperación, miedo, angustia en ellos, lo que permitió que fallaran (como lo hacemos regularmente nosotros), pero sabemos que a futuro, estos once, estuvieron dispuestos realmente a morir por Cristo, a causa de la cruz, para ellos era ganancia. Espero que para nosotros sea así también, aún cuando muchas veces hayamos negado a Jesús, estemos dispuestos a no hacerlo más y a morir por su causa.Segundo, cuando Jesús oró, porque estaba triste, me llama la atención, que las personas que él eligió para que lo acompañaran a orar, se durmieran, es un claro ejemplo de lo que nos pasa en la actualidad como iglesia, a veces no nos mantenemos sobrios, y nos dormimos, en lo que respecta a la oración, a una relación íntima con Dios, y nos dedicamos a dormir, a hacer actividades, a solo ir a la iglesia, y a no ser luz, ni interceder los unos por los otros, ya sea en oración o en obras. Dios nos ayude a velar y mantenernos despiertos.Tercero, y según mi opinión, lo más importante, Jesús; su alma en ese entonces estaba triste, ¿a quién de nosotros nos gustaría morir crucificados?, ¿a quién de nosotros nos gustaría saber que las personas que más amamos en el mundo nos negarán, nos engañarán, nos traicionarán, no nos acompañarán en oración?, creo que para cada uno sería decepcionante, como humanos, pero Jesús, con su infinito amor, pidió a Dios, que no se haga su voluntad, él vino con el propósito de morir por nosotros, de salvarnos de nuestros pecados, de vencer a la muerte y al diablo, y aunque ese costo era su vida, era el propósito de su vida. Ahora me pregunto y te pregunto... ¿Estamos dispuestos a morir por el propósito que Dios tiene para nosotros?, ¿estamos dispuesto a decir "Padre mío, si no puede pasar de mí esta copa sin que yo la beba, hágase tu voluntad."? Dios nos ayude a que sí estemos dispuestos, a cumplir con el propósito con el que nos envió, a seguirlo y a hacer su voluntad.Un lindo día para reflexionar, para ser mejores cristianos, para entregarnos a su voluntad y estar dispuestos a morir a nosotros, para que Jesús viva en nosotros, y más aún, radicalmente hablando, si es necesario morir en verdad por Dios, que tengamos la valentía de hacerlo, sabiendo que todas las cosas nos ayudan a bien, y que por medio de Cristo, tenemos vida eterna.Bendiciones al que lea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario